Cómo dejar de pensar lo peor
- Sergio Villamizar
- 19 jun
- 4 Min. de lectura
Pensar lo peor se convierte, sin que lo notes, en una costumbre silenciosa que se cuela en todos los rincones de tu vida. Te levantas y ya estás imaginando que algo malo va a pasar en el trabajo. Sales a la calle y te preparas mentalmente para un accidente. Si alguien no te responde un mensaje, ya estás convencido de que te están evitando. Y si todo está “demasiado bien”, sientes que algo seguro va a estallar. Vivir así no es vivir: es sobrevivir con el freno de mano puesto. Esta forma de pensar, aunque parece tuya, es solo una programación mental que aprendiste hace años y que hoy puedes reescribir.

Fotografía tomada de Freepik
Las raíces invisibles de tus pensamientos negativos
Julián llegó al programa Megahumanos después de años sintiéndose atrapado en una cárcel mental que él mismo no sabía cómo abrir. Por fuera, todo parecía estar bien: un trabajo estable, una familia que lo quería, una vida sin grandes sobresaltos. Pero por dentro, su mente no se callaba. Todo el tiempo estaba anticipando problemas que no existían, sufriendo por cosas que no habían pasado y dudando de sí mismo incluso en las decisiones más simples.
Pensamientos como
“seguro algo va a salir mal”, “no soy lo suficientemente bueno”, o “nada me sale bien” eran el pan de cada día.

Durante los módulos iniciales, descubrimos que Julián no había aprendido a pensar así por casualidad. Desde pequeño, había crecido en un entorno familiar donde la preocupación era sinónimo de responsabilidad. Su madre solía repetir frases como “hay que estar preparados para lo peor” o “mejor no confiarse para que no te decepcionen”.
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Su padre, aunque presente, vivía en un estado constante de tensión económica, repitiendo que “nunca hay que bajar la guardia porque la vida siempre te sorprende mal”.
Estas ideas, repetidas en su entorno desde niño, se instalaron como verdades absolutas en su subconsciente. Así, Julián se convirtió en un adulto que pensaba que estar en calma era sinónimo de estar en riesgo, y que el descanso mental era un lujo peligroso.
En Megahumanos, Julián aprendió algo clave: sus pensamientos de angustia no eran una falla personal, sino una programación heredada que podía cambiar. A través de prácticas como la meditación guiada en estados de ondas cerebrales alfa, ejercicios de limpieza emocional, y sesiones en las que pudo reconectar con su historia sin juicios, comenzó a reescribir su diálogo interno.
Megahumanos no solo le dio herramientas, le dio comprensión, presencia y un nuevo tipo de libertad: la de poder habitar el presente sin estar huyendo mentalmente del futuro. Hoy, Julián ya no se levanta pensando en lo peor. Se levanta sabiendo que lo que sea que venga, él sabrá cómo afrontarlo desde la calma, no desde el miedo.
Allí entendió algo que le voló la mente:
la mayoría de los pensamientos negativos no vienen del presente, sino de la mente subconsciente atrapada en memorias no resueltas.
Herramientas para dejar de pensar lo peor
Aquí te dejo varias herramientas que puedes empezar a aplicar desde ya:
1. Detecta el pensamiento raíz
Cada vez que te descubras imaginando un escenario negativo, detente. Pregúntate:¿Qué estoy creyendo que haría esto tan terrible? ¿Qué parte de mí se está sintiendo en peligro?No te pelees con el pensamiento, obsérvalo como un mensajero. Al traerlo a la conciencia, pierdes el 80% del poder que tenía sobre ti.
2. Hazte amigo del miedo
Sí, leíste bien. El miedo no es el enemigo. Es una señal de que hay algo dentro de ti que quiere protección. En lugar de luchar contra él, respóndele:“Gracias por querer protegerme. Ya no necesito que lo hagas desde el pánico, puedo hacerlo desde el amor y la presencia.”Esta pequeña conversación interna genera un cambio bioemocional inmediato.

3. Activa el circuito de nuevas posibilidades
Tu mente tiende a repetir lo que conoce. Pero si empiezas a preguntarte conscientemente:¿Y si todo saliera mejor de lo que espero? ¿Y si esta situación está abriéndome una nueva oportunidad?,le das una nueva dirección a tu atención. Y donde va tu atención, va tu energía.
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4. Respiración de limpieza mental (2 minutos)
Haz esto cada mañana:
Inhala profundo por la nariz en 4 tiempos
Sostén el aire 4 segundos
Exhala lentamente por la boca en 6 tiempos
Mientras exhalas, imagina que estás soltando pensamientos viejosRepite por dos minutos, con los ojos cerrados. Esta práctica baja los niveles de cortisol y reconfigura tu estado vibracional.
5. Hipnosis de reprogramación antes de dormir
Justo antes de dormir, tu cerebro entra en ondas theta: el estado perfecto para reprogramar el subconsciente. Escucha audios de hipnosis donde repitas frases como:
Estoy a salvo en el ahora.
Mi mente es mi aliada.
Estoy aprendiendo a confiar en la vida.
En mi canal de YouTube te comparto meditaciones guiadas que te van a servir grandemente👉 https://www.youtube.com/@Autosanacion
Y tú, ¿cuánto tiempo más vas a seguir viviendo atrapado en tus películas mentales de terror? No necesitas ser valiente. Solo necesitas decidir que ya no quieres vivir así.
Te invito a dar ese primer paso hacia tu versión más libre, consciente y poderosa. Únete a Megahumanos y descubre cómo liberar tu mente de las cadenas invisibles .
Tu mente no es tu carcelera. Es tu aliada. Solo necesita un nuevo liderazgo: el tuyo.
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